El inconveniente del uso de la tierra negra en los trabajos de jardinería

Tradicionalmente, hace varias décadas que se usa la denominada vulgarmente “TIERRA NEGRA”, o también denominada “tierra vegetada” en los ambientes académicos de los Arquitectos o Ingenieros Civiles.

El material que suele usarse es el horizonte superficial de los suelos de las zonas rurales, zonas urbanas y zonas complementarias. Los suelos que corresponden al A.M.B.A (Área Metropolitana de Buenos Aires) corresponden al “ORDEN MOLISOLES)”. Son materiales porosos, ricos en materia orgánica, de granulometría media a media fina, con formación de terrones (agregados) entre 0,5 – 2 mm, de una fertilidad física y química importante (rica en nitrógeno, potasio, fósforo, calcio, magnesio) para las plantas y con alta actividad microbiológica (Horizonte A).

Ese material suele tener un espesor 25 – 35 cm., promoviendo no sólo el desarrollo de las raíces, sino que, éstas juntamente con las poblaciones microbianas presentes (bacterias, hongos, actinomicetos) se hallan asociadas formando la “RIZOSFERA”.

Esta rizosfera pasa a ser un verdadero “FILTRO NATURAL”, que da cierta estabilidad a los ecosistemas y protege a los acuíferos, que sean contaminadas por los efluentes provenientes de las actividades humanas. Para ser más claros, al desmontar ese horizonte, que además debemos saber que lleva entre 70000 a 100000 años su formación, para ser usado para el cultivo de plantas (como tierra de relleno o como mejoradores de suelos) infligimos en el ecosistema un impacto ambiental irreversible.

Por esta razón TERRAFERTIL®, manteniendo sus políticas de cuidado del medio ambiente se suma a estas acciones, evitando ofrecer “Tierra Negra” y en reemplazo, tiene una acción enérgica en promover el uso de productos para jardín a partir del uso de “SUSTRATOS” en base a material renovables.

El diseño de los mismos tiende a lograr materiales porosos con las características ya mencionadas en las propiedades de la tierra negra, pero obteniéndose mediante diversas mezclas o “blend”, a partir de insumos transformados por procesos de compostaje. Estas transformaciones permiten reciclar materiales que son sub productos de diversas industrias, poniéndolos en valor y ser nuevamente utilizados para fabricar “SUSTRATOS” para jardines (Ej.: Chipeado de poda urbana, cama de stud, corteza de pino de la industria papelera, etc.)

Estas acciones claramente refuerzan nuestro compromiso ambiental en dar uso a los subproductos mediante los procesos de reciclaje, poniendo a esta empresa a la vanguardia a través de los volúmenes de compost que introduce en el mercado para desestimular el uso de la tierra negra (> 35000 m3/año).

También queremos hacer conocer a nuestros clientes que desde el año 2014, al estar certificados por las normas ISO 9000 e ISO 14000, estamos comprometidos definitivamente con el ¡CUIDADO AMBIENTAL!, ajustándonos al decreto-ley provincial N° 8912/77 que regula el “ORDENAMIENTO TERRITORIAL Y USO DEL SUELO”.